Aseguran que en las pedanías de La Melgosa y Mohorte las consultas se redujeron a la mitad a principios del verano
Colapso en Urgencias. Es lo que, en su comunicado de este martes, la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Cuenca denuncia que ocurrió el pasado fin de semana en el hospital Virgen de la Luz, consecuencia, aseguran, del hecho de que la 2ºB permanezca habitualmente cerrada y solo se abra cuando hay una alta demanda de habitaciones.
En concreto, señalan que el viernes las urgencias estaban “desbordadas” con más de 25 pacientes “hacinados en camas, camillas y sillones a la espera de ser ingresados”, una espera que a su entender no hubieran tenido que realizar de estar abierta la citada 2ºB.
La planta, finalmente, se abrió, pero ya el sábado por la mañana, “después de mucha tensión y presiones y con el desabastecimiento correspondiente de material estructural y humano adecuado”.
Critica además este colectivo que, desde la gerencia del hospital, se apunte que este colapso no sea fruto de una mala organización, sino “de los virus de la gripe. No se dan cuenta de que nuestra provincia, nuestra región, es una zona envejecida que enferma por reagudizaciones respiratorias de patologías crónicas y otras descompensaciones en invierno, y que siempre es así”.
Se pregunta así la Plataforma “¿dónde está la planificación en materia de salud pública para evitar estos caos que llevan al aumento de la morbi-mortalidad y al sufrimiento de pacientes y familiares?”.
La Plataforma insiste en denunciar que se mantengan plantas cerradas, lo mismo que quirófanos “a medio gas” y que se externalicen las pruebas “obligando a la gente enferma a esperar en condiciones inadecuadas o a ser tratada sin todas las garantías”.
Respuesta de la Gerencia
La Gerencia del Área Integrada de Cuenca apunta en nota de prensa que, debido a una mayor afluencia de pacientes con síntomas derivados de gripe estacional, un 25 por ciento más con respecto al año pasado en el mismo periodo de tiempo, se está provocando una mayor frecuentación de los Servicios de Urgencias hospitalarios.
"Por ello, y para dar la mejor respuesta a esa demanda, se han adoptado medidas como la reapertura de las 28 camas de hospitalización de la planta 2ª B, para lo que además se ha ampliado la plantilla", señalan, y aseguran que ahora mismo no hay ningún colapso en Urgencias -según la Plataforma este se produjo el pasado viernes, hasta que se reabrió la 2ªB-.
A su entender, esto demuestra "como el cierre de camas es una medida completamente flexible, de tal manera que cuando hay que abrirlas no existe ningún problema para hacerlo, pues lo que se está haciendo es racionalizar los recursos sin que ello suponga un perjuicio asistencial para los pacientes".
La Gerencia reconoce y agradece el esfuerzo que están realizando todos profesionales, y en especial los de Urgencias, a la vez que comprende la incomodidad que en algún momento pueda suponer esta situación para los pacientes y sus familiares.
Finalmente, desde el Área Integrada se recomienda a todos los ciudadanos que ante los habituales síntomas de gripe acudan al servicio de Urgencias de su centro de salud y eviten ir al hospital con patologías que pueden resolverse en los centros de Atención Primaria.
Sin sustituciones en Primaria
En otro orden de cosas, en su comunicado la Plataforma también critica la no contratación de personal para sustituciones en Atención Primaria, lo que a su entender está “sobrecargando” a los profesionales. En el caso de la provincia , consideran que los hay que no pueden llegar a todos los pueblos, pues a los que asisten habitualmente tienen que añadir aquellos cuyos responsables están de vacaciones o de baja, “obligando a gente enferma a que acuda directamente a las urgencias del hospital”.
A modo de ejemplo, señalan que en las pedanías de La Melgosa y Mohorte las consultas se redujeron a la mitad a principios del verano, pasando de dos a solo una por semana. En el caso de Fuentes, señalan que han pasado de cinco a tres días de consulta. “Todo con la promesa de que sería una situación transitoria de verano: un engaño”. Denuncian que los recortes sigan “manteniéndose y aumentando en materia sanitaria” cuando “hay dinero para otras cosas y, según dicen, estamos saliendo de la crisis”.
Enfermos de hepatitis C
La Plataforma se solidariza con los enfermos de hepatitis C que llevan varios meses movilizándose para exigir al Gobierno central el tratamiento con Sovaldi, que, según se ha difundido, tendría un poder de curación de entre el 90 y el 95 por ciento aunque su tratamiento tiene un coste bastante elevado, de 60.000 euros por tres semanas.
“No deja de ser vergonzoso que alguien, en este caso enfermos gravísimos, tenga que salir a la calle para que un gobierno les escuche”, señalan.
Este colectivo, eso sí, añade que quien habla de la eficacia y falta de efectos secundarios del Sovaldi es la propia multinacional farmacéutica que lo comercializa, por lo que advierte de que “aunque parece presentar un importante avance en el tratamiento, no deja de tener interrogantes”.
“Parece que en estos momentos están en trámite de aprobación otros tratamientos contra el virus de eficacia similar y menor coste, por lo que es posible que la multinacional farmacéutica esté intentando aprovecharse de la ineptitud del Ministerio de Sanidad y de la situación de los pacientes”, teme la Plataforma, que ante esta situación exige “una información clara y rigurosa” y denuncia “cualquier tipo de tratamiento mercantilista por parte de las grandes industrias farmacéuticas, porque la vida de una persona no es negociable. Hay que revisar el coste del tratamiento ajustándolo a la inversión realizada”. Y añade que “si el laboratorio Gilead persiste en mantener precios exageradamente superiores al coste real del fármaco, este debe ser fabricado como genérico: las leyes internacionales lo permiten en casos especiales de salud pública”.
Productividad variable
Finalmente, la Plataforma insiste en denunciar el reparto de la productividad variable que el Sescam abonó en la nómina de diciembre, ya que “ha habido trabajadores que han cobrado cuatro veces más que otros aun haciendo el mismo trabajo”, una “discriminación” que atribuye “a la no adhesión” de los trabajadores que menos han cobrado a un escrito en el que la Gerencia fijaba sus objetivos.
“Hasta hace unos años, adivinad cuántos, los listados y las cantidades a cobrar eran públicos y cualquiera podía ver lo que habría cobrado otro trabajador. Ahora, escondiéndose tras la ley de protección de datos, esa misma que se pasan por el forro cuando quieren, no facilitan cantidades, ni de trabajadores ni de equipo directivo. Que cada cual saque sus propias conclusiones”, concluyen.
Fuente: Las noticias de Cuenca.
